Ayer rescatamos a Estela de un lugar horroroso, del que salimos con el corazón roto por las cosas que vimos y el trato hacia los animales, pero como bien explica Ismael López Dobarganes en su libro “Animales como tú”, en esos momentos tienes que poner tu mejor cara para salvar la vida de alguno de ellos. Por desgracia en este país, los maltratadores de animales están más protegidos que los que dedicamos nuestras vidas a salvarlos. Pero a pesar de todas las dificultades económicas debido a la covid-19, seguimos rescatando vidas.
Estela es una corderita a la que mordieron unos perros y a la que no atendió ningún veterinario para no tener pérdidas económicas, como hacen en la mayoría de explotaciones. Tiene una infección muy grave, pero a pesar de su gravedad, ella es fuerte y sus ganas de vivir puede más. Al llegar a Fundación Santuario Gaia, Lia Dominguez rompió a llorar de la emoción y nos abrazamos todos. Coque Fernández Abella le realizó una revisión veterinaria y curó con mucho AMOR sus heridas. Aunque ahora nos queda curar la más importante, la de su corazón.
Gracias por ayudarnos, porque con vuestra ayuda podemos salvar a animales como Estela que nos necesitan.
