Este año esta siendo un poco pasado por agua, que ya ni sabemos cuantos días de lluvia llevamos. Aunque no para todos es igual la lluvia. Nosotros, los humanos, lo vemos como un entorpecimiento a nuestro trabajo, porque siempre es más difícil hacer las tareas del día a día. Pero muchos de los habitantes están encantados con ella, como las vacas y toros que cuando llueve nunca quieren resguardarse.
Los burros son más delicados y no les gusta mucho. Cuando hay probabilidad de lluvia siempre se quedan bajo techo, pero a veces tenemos días increíbles de sol y de pronto se forma una tormenta, cayendo una tromba de agua increíble. Por eso ayer, cuando pasó esto, fuimos a buscarlos pero nos los encontramos tan plácidamente pastando, como si nada. Eso si, no podía estar más hermosos.
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