Martina cada día está más grande y alegre.
Como a cualquier niño lo que más le gusta (a parte de su biberón) es jugar y aquí la podemos ver feliz corriendo y saltando detrás de los perros. Lo que pasa que el saltar tanto a veces pasa factura y ella se ha hecho un poco de daño en una de sus manos, pero eso no le impide seguir pasándoselo bien ?
Ella ha tenido la suerte de llegar al Santuario, donde podrá vivir tranquila y sin peligro. Pero lo normal es que hubiera acabado siendo un plato de cordero.“¿Nos ayudas a seguir salvando vidas?” color=”green”]• Por tan solo 1€ al mes puedes hacerte Teaming
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